Primer trimestre récord para exportaciones agroalimentarias de México
Publicado el 24 junio 2021
El valor de los envíos de productos agropecuarios, pesqueros y sus procesados para consumo humano directo superó los US $11,000 millones.
La pandemia del Covid-19 afectó a México más que a la mayoría de países en el mundo: con más de 230,000 muertes, es el cuarto país con mayor número de incidencias. Esto muestra el nivel de alerta al que ha estado sujeta la población, que incluyó restricciones severas a la movilidad y duros golpes a la confianza empresarial.
Sin embargo, en paralelo la luz nunca dejó de brillar desde el mercado internacional. Particularmente, los alimentos tuvieron una menor reducción en la demanda debido a su necesidad o a su bajo costo relativo frente a otras opciones prescindibles para el consumidor. De esta forma, las exportaciones agroalimentarias mexicanas crecieron 2.65% el año pasado, en comparación a una caída de 8.5% en el PIB del país.
En el siguiente cuadro, se muestra un detalle de los principales componentes de este segmento, y el desempeño de sus ventas en términos de cantidad o volumen.
El alza reciente
Y las buenas noticias continuaron este año. La mayoría de productos destacados del portafolio agroalimentario se ha mantenido al alza, e incluso ha revertido su caída. En términos de ingresos, la recuperación de las bebidas alcohólicas en línea con la mejor perspectiva para el crecimiento económico. La cerveza de malta genera más de US$5,000 millones anuales en ingresos por exportaciones, mientras que el tequila aporta más de US $2,000 millones al año.
La cifra exacta del total de ingresos por exportaciones de productos del portafolio agroalimentario en los tres primeros meses del año es US $11,051 millones, el nivel más alto desde 1993, según destaca una nota de El Financiero. Con esto, la balanza comercial agropecuaria y agroindustrial alcanzó un saldo positivo de US $2,827, el cuarto más alto para el primer trimestre desde 1995.
Futuro promisorio
Lo registrado en el primer trimestre puede ser solo un aviso de lo que viene el resto del año. El ímpetu de la recuperación de la demanda en Estados Unidos, Reino Unido, Canadá y Europa puede ser tal que las ventas podrían tener crecimientos mayores en valor que en volumen debido al copamiento de la capacidad.
No obstante, siempre hay que tener presente que el desempeño de la industria agroalimentaria depende en gran medida de cuestiones climatológicas. Las lluvias, temperaturas del aire y del mar pueden jugar tanto a favor como en contra, mientras que la fecha de la poda se puede cambiar para que las cosechas se lleven a cabo en fechas acordes a las condiciones del mercado.
Pero por encima de todo, el consumo de bienes con alta capacidad de almacenaje como las bebidas, los productos de panadería y los productos congelados parecen estar al margen de las restricciones anteriores. Incluso, un aparte de la producción del 2020 podría llegar o haber llegado a las manos de los consumidores en los meses recientes.
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