El Coronavirus habría catapultado exportaciones de jengibre peruano
Publicado el 17 julio 2020
El uso del tubérculo como descongestionante y desinflamante de las vías respiratorias podría ser la razón que explica el pico en sus ventas hacia el exterior entre febrero y mayo.
El impacto del coronavirus ha sido generalmente negativo para la economía global. Sin embargo, algunos productos vinculados al cuidado de la salud se han visto beneficiados, incluso en respuesta a un patrón de consumo distinto al que determina principalmente su demanda.
En el caso del jengibre o kion, su perfume intenso podría no haber sido la causa por la cual sus exportaciones tuvieron un despunte en febrero de este año. El tubérculo utilizado en la cocina oriental, en bebidas gasificadas y pastelería de influencia anglosajona tiene propiedades curativas para los síntomas de las enfermedades que afectan al aparato respiratorio. Un artículo publicado por el Centro Nacional para la Información Biotecnológica de Estados Unidos (NCBI) destaca que el gingerol y el shogaol ayudan a dilatar las vías respiratorias, de manera que resulta efectivo como un elemento terapéutico para facilitar el tránsito del oxígeno y la evacuación de los gases tóxicos de los pulmones.
Curiosamente, la demanda de jengibre se ha disparado alrededor del mundo en paralelo con la explosión de la pandemia del coronavirus, lo que sugiere una mayor demanda por parte de quienes buscan reforzar el tratamiento de síntomas con productos naturales. En el siguiente gráfico, se ve la evolución de las exportaciones peruanas de jengibre en los últimos tres años y se muestra el alza referida. Cabe tener en cuenta que las estadísticas a junio podrían estar pendientes de actualización, por lo que la línea azul podría terminar estando por encima de la negra.
Cabe resaltar que el alza es resultado de un mayor movimiento de mercadería, y no de un aumento de precios, que fueron mayores en el primer semestre del año anterior. La comparación entre los valores de ambos periodos se puede ver en el siguiente gráfico.
En consecuencia, la alta disponibilidad del producto ha permitido que el 2020 tenga un muy buen inicio para los productores y exportadores de jengibre peruano. El pico de marzo ha permitido que el precio promedio del año esté por encima de dos dólares por kilogramo, pero el resto de meses la diferencia se basa en cantidad. Los dos siguientes recuadros muestran los resultados de comparación del primer semestre del 2019 con el mismo periodo del 2020.
La coyuntura de la pandemia ha resultado beneficiosa para los países productores de jengibre. El Perú es el cuarto productor de este tubérculo en el mundo, luego de China, Tailandia e India, por lo que ha estado entre los favorecidos.
En cuanto a destinos, el país se ha consolidado como proveedor en América y Europa. Todos los mercados grandes de estas regiones son atendidos, con Países Bajos como puerta de entrada al viejo continente a través del puerto de Róterdam, aunque también se hacen envíos directos a los destinos finales. La vía utilizada es principalmente la marítima, con 95% de participación, seguida de la aérea (4%) y la terrestre (1%).
Es interesante notar el crecimiento en Alemania y Países Bajos, dos mercados en los que la sofisticación del consumidor es mayor a la del resto del mundo. Esto podría estar detrás de la búsqueda de tratamientos naturales para combatir los efectos de la gripe ocasionada por el coronavirus.
Por otro lado, queda claro que el mercado estadounidense debe mantenerse bajo la mira, por lo que su mayor escala significa para los exportadores ,en términos de la capacidad, generar crecimiento por cada punto porcentual de aumento en las ventas. Es más conveniente hacer embarques desde el Perú debido a que, en comparación a los puertos asiáticos, la distancia de los puertos de la costa oeste es alrededor de 30% menor, y en el caso del Atlántico, se puede aprovechar que no es necesario hacer transbordos o pagar fletes más caros para cruzar el canal de Panamá como cuando vienen desde China, Tailandia o la India.
En general, la explosión reciente puede ser una oportunidad para aumentar la participación del jengibre peruano en mercados consolidados y, especialmente, los incipientes. Las cifras podrán ser menores en los mismos meses del próximo año cuando pase el impacto de la pandemia, pero los compradores ya habrán establecido una relación con los proveedores peruanos, que puede perdurar a lo largo del tiempo. Esto requiere trabajar en la promoción comercial y la facilitación de los procesos logísticos y burocráticos, con responsabilidad tanto por parte de los empresarios como del gobierno.
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