Exportación de cerdo congelado desde Chile en aumento

Publicado el 19 agosto 2019

El país sudamericano no sólo destaca por su cobre, salmones, madera y derivados. Por el lado del sector pecuario, la producción de porcino es muy competitiva a nivel internacional...

Cuando se habla del portafolio exportador de Chile, lo primero que se viene a la mente es cobre, salmón, madera, pulpa o celulosa para papelería, frutas y vinos. Sin embargo, los productores de porcino también han ocupado un lugar importante en la industria del país, y han logrado desarrollar un nivel de competitividad que les ha permitido llegar a grandes y lejanos mercados, además de abastecer a la región.

De hecho, según World Exports, Chile ocupa el décimo tercer lugar, con una participación de 1.5% a nivel global, y el tercero a nivel regional, luego de dos países de gran extensión y tradición pecuaria, como Brasil 3.8%) y México (1.9%). Esto es meritorio si se tiene en cuenta que se trata de un país ubicado a mayor distancia por su latitud, y a que no tiene la abundancia de espacios para agricultura extensiva que abastezca la producción de piensos para alimentar a los animales.

Por el momento, los destinos de exportación han sido mayormente asiáticos y regionales. Los envíos se han concentrado en mercados que no son grandes productores, ya que los principales exportadores son norteamericanos o de Europa Occidental.

Por otro lado, es importante destacar el desarrollo del mercado peruano como señal del aprovechamiento de la competitividad. La industria porcina en el Perú no es pequeña, pero no alcanza los niveles de producción ni calidad que permiten a los productores chilenos llegar con líneas premium o de menor precio.

Cabe destacar que los envíos se hacen por vía marítima, incluso en el caso de países vecinos como Perú, que podrían hacerse por tierra. La durabilidad del producto congelado permite aprovechar formas de transporte eficiente siempre que no se rompa la cadena de frío, lo que garantiza que se llegue al público con un producto de alto valor nutricional y bajo en grasas saturadas si es que se consume en filete sin piel.

En términos generales, el posicionamiento de Chile como proveedor global de carne porcina es un ejemplo de desarrollo de competitividad basado en la identificación de mercados con potencial. De esta forma, la producción ha podido crecer a un ritmo fuerte conforme se iba identificando nuevos compradores. De hecho, según la Asociación Gremial de Productores de Cerdos de Chile (Asprocer), la producción de este segmento de la industria pecuaria se multiplicó por nueve entre 1985 y el 2015.

El caso de la carne de cerdo chilena es, pues, un claro ejemplo de desarrollo para cualquier industria pecuaria o agrícola que busque expandirse sobre la base de la competitividad e identificación de demanda insatisfecha alrededor del mundo.

Para más información sobre las exportaciones porcinas y pecuarias de este país y el mundo, puede visitar el portal de Veritrade.
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