Colombia y Japón juegan un partido aparte en el Mundial
Publicado el 06 abril 2018
Japón es uno de los principales socios comerciales de Colombia. Ambos países importan y exportan productos de los que el otro país carece o es menos eficiente en producir, y de esta forma mejoran sus economías y lazos comerciales.
Por el lado de las exportaciones colombianas, Japón es el principal o el segundo destino para muchos de los productos más importantes de su portafolio. Sobre la base de la elección de las 10 principales partidas para el 2017, posteriormente agrupadas en categorías (ej: claveles y otras flores, que agrupa a diversas partidas), las estadísticas mostradas por el sistema de Veritrade permiten encontrar lo más destacado, resumido en la siguiente tabla.
Salvo los fungicidas, los demás productos de la tabla forman parte de la lista de productos emblemáticos de Colombia, lo que evidencia la importancia de Japón para las exportaciones del país sudamericano. Sin embargo, los fungicidas son también una clara señal de la diversificación del portafolio, al incluir productos derivados de procesos petroquímicos.
En términos de importancia como destino, Japón destaca para el café, las flores y los fungicidas, como muestran las siguientes tablas. Por un lado, se trata de un destino con consumidores de alto poder adquisitivo, como lo comprueba el mayor valor por envío, que evidencia mayores cantidades o precios. Adicionalmente, la agricultura de productos como arroz y trigo demanda fungicidas, producidos por empresas transnacionales que también redistribuyen al resto del mundo.
Por el lado de las importaciones, Colombia trae productos de alta complejidad en el ensamblaje, así como insumos para la metalmecánica. Repitiendo el criterio de selección aplicado para las exportaciones, es decir, tomando como base de para la elección a las 10 principales partidas para el 2017, posteriormente agrupadas en categorías (ej: vehículos motorizados, que agrupa a diversas partidas), de las estadísticas mostradas por el sistema de Veritrade se obtiene la siguiente clasificación:
La industria automotriz es el principal vínculo comercial desde Japón hacia Colombia, por la diversidad y trayectoria de las marcas de vehículos de todo tipo. Como parte de este segmento, también es una fuente importante de maquinaria para construcción, como puede notarse en el rubro de máquina giratoria, y en forma complementaria, con la importación de llantas para camiones mineros. Cabe añadir que buena parte de las importaciones desde México corresponden a marcas japonesas y coreanas, de manera que el origen puede esconder la procedencia del capital.
Por último, es importante destacar la posición de Japón en el mercado tecnológico. Ante la mayor competitividad de China y países del sudeste asiático, el imperio ha quedado como un desarrollador de partes especializadas, a lo igual que Estados Unidos. Esto se puede ver en su posición en el ranking de proveedores de piezas para impresoras y copiadoras.
En términos generales, ambos países se benefician mutuamente del abastecimiento. Como la mayoría de países latinoamericanos, Colombia saca provecho a los segmentos en los que es más competitivo, principalmente materias primas como el café en grano sin tostar y el carbón, requeridos por el mercado japonés, pero poco rentables de producir en el archipiélago asiático. Del mismo modo, los países latinoamericanos tampoco tienen las condiciones para desarrollar industria pesada de gran magnitud, y como ya se mencionó, incluso las marcas japonesas han derivado operaciones a otros países para lograr ser más eficientes.
En otras palabras, el beneficio entre ambos países forma parte de toda una cadena global de comercio, en la que la especialización, la calidad y la eficiencia tienen la última palabra. Con el comercio, nos beneficiamos todos.